En enero de 2025, Chile dará un paso significativo en la protección social de sus ciudadanos con la implementación de la reforma de pensiones, aprobada tras dos años de debates en el Congreso. Este cambio legislativo promete transformar la vida de aproximadamente 2,8 millones de personas mayores, quienes verán sus pensiones incrementadas entre un 14% y un 35%.
Además, se introducirá la Pensión Garantizada Universal (PGU) de $250.000, que beneficiará a los pensionados de 82 años o más. A continuación, exploraremos los aspectos más destacados y los beneficios que esta reforma traerá consigo.
Índice de contenido:
Principales beneficios de la reforma
La reforma de pensiones se articula en torno a varios hitos que buscan mejorar la calidad de vida de los jubilados y fomentar la seguridad económica. Uno de los pilares de esta reforma es el aumento de la Pensión Garantizada Universal (PGU), que alcanzará los $250.000 para los pensionados de 82 años o más.
Este aumento se implementará de forma gradual y se espera que beneficie a un amplio espectro de la población.
Asimismo, el nuevo sistema incluirá compensaciones para más de 900 mil afiliados que recibirán beneficios por sus años cotizados, y 800 mil mujeres se beneficiarán de compensaciones por diferencias en las expectativas de vida.
Estos ajustes son cruciales para garantizar que tanto hombres como mujeres que se jubilen con ahorros similares reciban pensiones equitativas.
Ampliación del Seguro de Lagunas Previsionales
Otro aspecto destacado de la reforma es la ampliación del Seguro de Lagunas Previsionales, que permitirá a los trabajadores cubrir sus cotizaciones durante períodos de cesantía.
Este seguro es fundamental para garantizar que los afiliados no pierdan sus derechos previsionales en momentos de inestabilidad laboral. A partir de su implementación, se espera que más personas puedan acceder a este beneficio, lo que les dará mayor tranquilidad ante la posibilidad de desempleo.
Nueva cotización de 7% a cargo del empleador
La reforma también incluye una nueva cotización del 7% que será responsabilidad del empleador, comenzando con un 1% adicional que se incrementará gradualmente. Este cambio tiene el objetivo de fortalecer el sistema de pensiones, asegurando así que haya más recursos disponibles para los beneficiarios. Con esta medida, se espera mejorar la rentabilidad y la eficiencia de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP).
Detalles importantes sobre la nueva cotización
La nueva cotización del 7% se implementará de manera gradual durante un período de nueve años. Este enfoque permitirá a las empresas y trabajadores adaptarse a la nueva normativa sin generar un impacto abrupto en la economía laboral. Es importante señalar que el 4,5% de esta cotización se destinará a las cuentas individuales de los afiliados administradas por las AFP, mientras que el 4,0% será para el nuevo Seguro Social, que brindará una protección económica ante la vejez, invalidez y fallecimiento.
El nuevo Seguro Social es un mecanismo diseñado para ofrecer seguridad financiera a las familias de los trabajadores. Este sistema se financiará exclusivamente a través de las cotizaciones de los empleadores, lo que significa que será fundamental para garantizar ingresos estables en situaciones de vulnerabilidad. La compensación por años cotizados y el bono por expectativas de vida para mujeres son solo algunas de las características más relevantes de este nuevo marco.
Mejoras para los trabajadores independientes
La reforma también contempla medidas para facilitar la inclusión de los trabajadores independientes en el sistema de pensiones. Se establecerán mecanismos simplificados que permitirán que estos trabajadores puedan cotizar de manera voluntaria, utilizando convenios automáticos de pago desde sus cuentas bancarias. Esta inclusión es esencial, ya que muchos trabajadores independientes han estado excluidos del sistema previsional, lo que ha llevado a una brecha significativa en la protección social.
Impacto a largo plazo de la reforma
Con la implementación de estas medidas, se espera que la reforma tenga un impacto significativo en la calidad de vida de los jubilados y en la sostenibilidad del sistema de pensiones en Chile. A medida que se vayan aplicando los beneficios, los actuales jubilados y aquellos que se pensionen en los próximos 30 años verán mejoras en sus pensiones, lo que contribuirá a reducir la pobreza en este grupo demográfico.
Es importante mencionar que la legislación también incluye la mejora en la eficiencia y rentabilidad de las AFP, lo que permitirá que los afiliados elijan administradoras que ofrezcan las mejores condiciones. La licitación del 10% de los afiliados, donde la administradora seleccionada será aquella con la menor comisión, es una medida que busca fomentar la competencia y mejorar el servicio a los afiliados.
Más medidas aprobadas
- Ampliación de la cobertura del Seguro de Lagunas.
- Facilidades para trabajadores independientes.
- Mejoras al proceso de cobranza previsional.
Con estas y otras medidas, la reforma de pensiones en Chile se posiciona como un cambio fundamental que busca asegurar un futuro más seguro y digno para todos los ciudadanos. La atención a las necesidades de los trabajadores y jubilados es esencial para construir un sistema más justo y equitativo, y esta reforma es un paso decisivo en esa dirección.