El FC Barcelona ha sido objeto de atención negativa tras la reciente firma de un acuerdo de patrocinio con Zero-Knowledge Proof, una startup de criptomonedas de bajo perfil registrada en Samoa. Este pacto, que tiene una duración de tres años, ha sido interpretado por muchos como un signo de desesperación financiera en un club que se encuentra en medio de una profunda crisis económica.
Con una deuda neta que supera los 469 millones de euros, el FC Barcelona ha buscado formas innovadoras de generar ingresos. Sin embargo, los críticos argumentan que este tipo de asociaciones pueden ser más problemáticas que beneficiosas, exponiendo a los aficionados del club a riesgos financieros considerables.
La naturaleza del acuerdo con ZKP
Zero-Knowledge Proof se presenta como el nuevo socio tecnológico del Barcelona en el ámbito de la blockchain y la inteligencia artificial. Sin embargo, su falta de reconocimiento en el sector suscita dudas sobre la fiabilidad de la empresa.
En su primer anuncio en redes sociales, ZKP contaba con apenas unas decenas de seguidores, lo que plantea interrogantes sobre su influencia y experiencia en el campo.
El nombre de la compañía proviene de un concepto criptográfico que permite a una parte demostrar que posee cierta información sin revelar datos personales. Esta técnica ha cobrado relevancia en el mundo digital, pero su aplicación en el contexto del fútbol sigue siendo incierta y puede resultar arriesgada para los consumidores.
Críticas y preocupaciones de los expertos
Martin Calladine, autor del libro Sin preguntas: Cómo el fútbol se unió a la estafa de las criptomonedas, ha expresado su inquietud ante la falta de información sobre la startup. Según él, este vínculo con el FC Barcelona evoca acuerdos previos que resultaron ser escandalosos, donde los clubes se asociaron con empresas de criptomonedas de dudosa reputación.
Los aficionados del club también podrían verse impulsados a adquirir monedas de ZKP, que podrían perder su valor rápidamente. Como parte del acuerdo, los canales digitales del Barcelona se utilizarán para promover los servicios de ZKP, lo que podría llevar a un mayor riesgo financiero para los seguidores del club.
Reacciones de la comunidad y del club
La controversia se intensificó cuando el influencer Andrew Tate, conocido por sus opiniones polémicas, publicó un video en las redes sociales promoviendo los sistemas de privacidad de prueba de conocimiento cero. Este video fue compartido en el canal de Telegram de ZKP, lo que generó aún más dudas sobre la reputación de la empresa y su alineación con el FC Barcelona.
Xavier Vilajoana, exdirector de la junta directiva del Barcelona, ha cuestionado la decisión del club de asociarse con una empresa que carece de transparencia. Según él, esta acción es una señal clara de que la desesperación ha comenzado a influir en las decisiones estratégicas del club, que enfrenta serias dificultades financieras.
La postura del FC Barcelona
Ante las numerosas críticas, el FC Barcelona emitió un comunicado en el que se distanció de la subasta de monedas de ZKP, aclarando que no tiene conexión con el token de la empresa ni asume responsabilidad alguna por su emisión. Sin embargo, la falta de claridad sobre los líderes de ZKP y la naturaleza de su financiación sigue siendo un punto de preocupación.
Además, ZKP ha indicado en su sitio web que no tiene una sede física, lo que agrava la falta de información sobre su operación y estructura. La situación se complica aún más al considerar que la firma estuvo previamente registrada bajo el nombre de Braxova Ltd, en una consultora offshore en Samoa, aunque esta referencia fue eliminada posteriormente.
El impacto de la situación financiera del club
Con una deuda neta que supera los 469 millones de euros, el FC Barcelona ha buscado formas innovadoras de generar ingresos. Sin embargo, los críticos argumentan que este tipo de asociaciones pueden ser más problemáticas que beneficiosas, exponiendo a los aficionados del club a riesgos financieros considerables.0
Con una deuda neta que supera los 469 millones de euros, el FC Barcelona ha buscado formas innovadoras de generar ingresos. Sin embargo, los críticos argumentan que este tipo de asociaciones pueden ser más problemáticas que beneficiosas, exponiendo a los aficionados del club a riesgos financieros considerables.1
Con una deuda neta que supera los 469 millones de euros, el FC Barcelona ha buscado formas innovadoras de generar ingresos. Sin embargo, los críticos argumentan que este tipo de asociaciones pueden ser más problemáticas que beneficiosas, exponiendo a los aficionados del club a riesgos financieros considerables.2