En mayo de 2025, la tasa interanual del índice de precios de consumo (IPC), el principal indicador de la inflación, experimentó una moderación de dos décimas, estableciéndose en un 2%. Este cambio es notable, ya que representa una décima menos en comparación con el dato avanzado y se debe a la variación en los precios de diversos grupos de productos y servicios.
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El impacto de la fruta en el IPC
La subida en el precio de la fruta ha elevado el IPC de los alimentos hasta un 2,5%. Esto ha sido un factor determinante en la medición de la inflación, ya que los productos frescos tienen un peso considerable en la canasta básica de consumo.
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), este es el valor más bajo del IPC general desde octubre del año anterior, que se situó en un 1,8%.
La inflación subyacente, que excluye elementos volátiles como alimentos no elaborados y productos energéticos, también ha mostrado una leve disminución, quedando en un 2,2%.
Se esperaba una reducción mayor, pero el comportamiento de los precios en el sector energético y de servicios ha influido en este resultado.
Causas de la moderación del IPC
La moderación del IPC, que se ha dado por tercera vez consecutiva, se atribuye principalmente a la disminución en los precios de los paquetes turísticos y a un aumento moderado en la factura de la luz.
El Ministerio de Economía, Comercio y Empresa ha destacado que la evolución favorable de los servicios relacionados con el turismo y el transporte aéreo de pasajeros ha contribuido a esta tendencia de precios. Por lo tanto, es importante observar cómo estos sectores se comportan en los meses venideros, especialmente con la llegada de la temporada alta de turismo.
Variaciones por grupos de productos
Analizando los diferentes grupos de productos, se observa que el sector de ocio y cultura ha reducido su tasa interanual en 2,2 puntos, situándose en un 0,5%. Este retroceso se debe al abaratamiento de los paquetes turísticos, lo cual es positivo para los consumidores que buscan opciones más accesibles para sus vacaciones.
En contraste, el grupo de alimentos y bebidas no alcohólicas ha incrementado su tasa interanual en cinco décimas, alcanzando el 2,5%, impulsado principalmente por el aumento en el precio de la fruta.
Además, si se comparan los precios de mayo con los de abril, se observa un leve aumento del 0,1%. Aunque el dato adelantado indicaba una estabilidad, la realidad ha mostrado un encarecimiento del 2,5% en el sector de vestido y calzado debido a la llegada de la nueva temporada, así como un aumento del 0,5% en los precios de las frutas.
Inflación por comunidades autónomas
El análisis del IPC por comunidades autónomas revela que todas ellas registraron tasas anuales positivas en mayo. Siete comunidades superaron el objetivo del 2% establecido por el Banco Central Europeo (BCE). Baleares y el País Vasco se posicionaron con las tasas más elevadas, alcanzando un 2,4%, seguidas de Extremadura con un 2,3%. Por otro lado, las tasas más bajas se dieron en Murcia, Canarias, Cantabria y Castilla-La Mancha, con cifras que oscilan entre el 1,3% y el 1,6%.
Las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla también mostraron variaciones, registrando un IPC interanual del 2,8% y del 1,8%, respectivamente. Estos datos reflejan una diversidad en el comportamiento de la inflación a nivel nacional, lo que sugiere que los consumidores deben estar atentos a las fluctuaciones en sus respectivas regiones.
Perspectivas futuras y conclusiones
La moderación de la inflación en mayo es un indicativo de que se están dando cambios en la dinámica de precios en el país. Sin embargo, es fundamental seguir de cerca la evolución del IPC en los próximos meses, especialmente considerando factores estacionales y las políticas económicas que puedan implementarse. La estabilidad de los precios en sectores como el turismo y la energía será clave para mantener esta tendencia y evitar una inflación descontrolada en el futuro. De aquí en adelante, los analistas estarán observando cómo se desenvuelven estos indicadores en un contexto económico que sigue siendo incierto.