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Mientras la comunidad internacional se prepara para la Cuarta Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo en Sevilla, un relato inspirador de perseverancia emerge desde Somalia. ¿Te imaginas cómo pueden cambiar las vidas de las personas a través de la financiación innovadora? En el corazón del Estado de Galmudug, dos jóvenes, Iftin y Aminaa, enfrentan desafíos significativos en su camino hacia la educación superior, pero su determinación y creatividad les permiten no solo superar obstáculos, sino también transformar su comunidad.
Desafíos en el camino hacia la educación
Iftin y Aminaa soñaban con asistir a la universidad en Abudwaq, pero se toparon con barreras importantes. Los constantes cortes de electricidad y el peligroso trayecto nocturno entre la ciudad y el campus hacían casi imposible que ellas y muchas otras chicas pudieran participar en las clases.
Pero, ¿acaso el deseo de aprender puede desvanecerse tan fácilmente? Con una visión clara, decidieron buscar soluciones que pudieran cambiar su realidad.
Contactaron al Sistema de Cofinanciación de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), una iniciativa que apoya proyectos comunitarios en Somalia.
Este sistema se enfoca en empoderar a las comunidades locales, dándoles las herramientas necesarias para financiar y gestionar sus propios proyectos de desarrollo. Con el respaldo de la OIM, Iftin y Aminaa se unieron a otras 19 alumnas para presentar una propuesta innovadora: financiar la instalación de farolas solares y un sistema de energía solar para la escuela mediante una suscripción popular.
Un proyecto transformador
En julio de 2022, la iniciativa de estas jóvenes recaudó 10,000 dólares. Pero eso no fue todo; la OIM no solo igualó esta cantidad, sino que aportó 50,000 dólares adicionales. Gracias a estos fondos, se logró iluminar el camino entre Abudwaq y la universidad, creando un entorno seguro para las estudiantes.
Además, se instaló un sistema de energía solar que ahora alimenta la universidad las 24 horas del día, proporcionando energía limpia y sostenible.
El impacto fue más allá de lo esperado. La comunidad decidió conectar un pozo cercano al nuevo sistema, lo que permitió el acceso a agua limpia y gratuita para todos los residentes de Abudwaq y las comunidades de pastores cercanas.
Esta mejora en la infraestructura no solo benefició a las alumnas, sino que también mejoró la calidad de vida de sus familias y vecinos. “Abudwaq no era uno de nuestros objetivos originales”, explicó Mohamed Mohamud Hussein, un funcionario de la OIM. “Pero consideramos la propuesta porque estaba bien pensada, era transformadora para la comunidad y se alineaba con nuestras prioridades de apropiación y sostenibilidad”. La historia de Iftin y Aminaa sirve como un modelo para otras comunidades somalíes que buscan soluciones locales a sus problemas.
El impacto del Sistema de Cofinanciación
Desde su implementación en 2021, el Sistema de Cofinanciación ha demostrado ser una de las herramientas más efectivas para la recuperación en Somalia. Hasta finales de 2024, se habían completado 42 proyectos, beneficiando a más de 580,000 personas en 22 distritos del centro del país. La comunidad y la diáspora contribuyeron con cerca de 500,000 dólares, que la OIM igualó con 2.3 millones de dólares, estableciendo un modelo de desarrollo basado en la acción colectiva.
En Farjano, un asentamiento para desplazados internos, la construcción de una nueva escuela primaria no solo proporcionó aulas, sino que también devolvió la esperanza a las familias. “Por primera vez, todos mis hijos pudieron ir a la escuela, y era gratis”, comentaba Shamso, madre de tres hijos. Otro ejemplo se observa en Mataban, donde un nuevo estadio juvenil ha fomentado la unidad y un sentido de identidad compartida entre los vecinos. “El estadio nos ha unido de un modo que nunca habríamos imaginado”, afirmaba Mustaf, un residente local.
El enfoque del Sistema de Cofinanciación, que exige a las comunidades identificar sus necesidades y recaudar fondos iniciales, permite un desarrollo ascendente, aumentando las posibilidades de éxito y sostenibilidad a largo plazo. Las iniciativas impulsadas por la comunidad están siendo reconocidas como soluciones efectivas en la Cuarta Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo (FFD4), que comienza en Sevilla el 30 de junio.
La historia de Iftin y Aminaa, junto con el éxito del Sistema de Cofinanciación, son ejemplos claros de cómo, incluso en entornos frágiles, la acción colectiva y la innovación pueden marcar la diferencia. Estos modelos de desarrollo no solo responden a las necesidades locales, sino que se convierten en un faro de esperanza para el futuro de Somalia y más allá.
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