Las acciones de Telefónica han dado de qué hablar, ¡y vaya que lo han hecho! Este año, han crecido un impresionante 16%, alcanzando un valor de aproximadamente 4,6 euros, el más alto desde julio de 2022. ¿Qué significa esto para la operadora? Simple: se posiciona como una de las más destacadas en el sector de telecomunicaciones europeo, reflejando un renovado optimismo en el mercado.
La llegada de Marc Murtra como presidente a principios de este año ha acelerado un proceso de desinversiones en la filial Hispam, lo que, junto con un cambio estratégico en la compañía, ha generado un ambiente más favorable entre los inversores.
Desinversiones y Nuevo Plan Estratégico
En noviembre, Telefónica revelará su nuevo plan estratégico, que se centrará en la consolidación del mercado europeo. ¿Por qué es tan importante? Porque se espera con gran interés, ya que los movimientos realizados por Murtra hasta ahora han sido muy bien recibidos, especialmente la venta de activos.
Los analistas de Bankinter sostienen que estas desinversiones no solo aumentan la eficiencia del grupo, sino que también refuerzan su balance financiero, reducen la exposición a riesgos de fluctuaciones cambiarias y permiten canalizar recursos hacia mercados con mayor potencial de crecimiento.
La clave para la credibilidad de Telefónica radica en la ejecución de estos planes. Esto podría fortalecer otras áreas de negocio, como VMO2 en el Reino Unido y el crecimiento de Telefónica Tech. Sin embargo, los analistas de Barclays advierten que la incertidumbre generada por la espera del nuevo plan estratégico podría limitar una revalorización más clara de la compañía.
¿Qué opinas tú? ¿Crees que podrán cumplir con las expectativas?
Riesgos y Oportunidades en el Mercado
Telefónica ha dejado claro que sus mercados clave son España, Brasil, Alemania y el Reino Unido. Pero Barclays señala que la empresa está abierta a expandir su presencia en otros segmentos, como tecnologías de la información y servicios B2B, incluso a través de adquisiciones.
Esto se complica por rumores en el mercado que sugieren una posible toma de control de la joint venture con Virgin, así como la posible compra de Vodafone junto con MasOrange. Además, hay una disposición entre los accionistas para respaldar una ampliación de capital, lo que podría ser vital para financiar nuevas operaciones o reducir deuda.
Según Barclays, esta incertidumbre es un factor preocupante. Hasta que se publique el nuevo plan estratégico en la segunda mitad de 2025, la presión sobre la acción de Telefónica podría persistir. Sin embargo, más allá de esta incertidumbre, los fundamentales de la compañía continúan mostrando un desempeño sólido. ¿Te parece que es un buen momento para invertir en ella?
Rentabilidad y Perspectivas Futuras
Un aspecto que destaca es el dividendo, que ha proporcionado una rentabilidad del 6,4% en el último año, con proyecciones que apuntan a un 9,8% para los próximos doce meses, según Bloomberg. Los analistas de Bankinter califican esta rentabilidad como “estable, elevada y atractiva,” y reiteran su recomendación de compra con un precio objetivo de 5 euros por acción. ¡Eso suena tentador!
Desde el punto de vista técnico, las acciones de Telefónica han comenzado a recuperar terreno tras descontar el dividendo, acercándose a la resistencia de 4,7 euros. La superación de este nivel podría llevar a la acción hacia el objetivo de 5 euros, según las proyecciones de Josep Codina, director de análisis de una revista especializada. Sin embargo, es crucial que el valor se mantenga por encima del soporte de 4,25 euros, ya que una caída por debajo de este nivel podría generar preocupaciones adicionales entre los inversores.
En resumen, Telefónica se encuentra en una encrucijada donde su capacidad para ejecutar su nuevo plan estratégico y manejar las desinversiones será clave para su futuro. A medida que la compañía navega por este terreno, los inversores estarán atentos a las próximas decisiones y su impacto en el mercado. ¿Estás preparado para seguir esta evolución?
